Evento – Simposio Internacional Conflicto, Memoria y Justicia
Simposio Internacional Conflicto, Memoria y Justicia
Por: Mateo Fajardo
Estudiante de Lic. en Literatura
Foto: http://humanidades.univalle.edu.co
El Simposio sobre Conflicto, Memoria y Justicia, realizado los días 9 y 11 de mayo, fue producto de la cooperación entre distintos grupos de investigación adscritos a las universidades Javeriana de Cali, del Valle, Autónoma de Occidente, y del Consejo de Gobierno de la Organización Regional Indígena del Valle del Cauca (ORIVAC) en la ejecución del proyecto “Pluralidad, Justicia y Construcción de Paz en el Valle del Cauca. Reflexiones desde la filosofía y las ciencias sociales sobre la otredad cultural en el marco del post-acuerdo en Colombia” . Un empeño que a primera vista podía parecer coyuntural, coaccionado por las circunstancias de un todavía reciente y torpedeado proceso de paz, fue en realidad un espacio multidisciplinario de intercambios intelectuales apuntalado en la nutrida trayectoria académica de los invitados nacionales y extranjeros, cual lo anunciara acertadamente el profesor Sergio de Zubiría en la conferencia inaugural. Producto, igualmente, de investigaciones concluidas y abiertas que dieron un tono activo al debate sobre las temáticas abordadas en los páneles, a saber, las experiencias de transición de la guerra a la paz y el papel desempeñado por las víctimas en ese tránsito, en cuya discusión intervinieron especialmente los invitados foráneos con los casos de la Guerra Civil española y el post-franquismo a cargo de Zoé de Kerangat, la figura del desaparecido en la dictadura argentina y la emblemática movilización de las Madres de la Plaza de Mayo a cargo del profesor Ricardo Forster y las causales psicológicas de la violencia expuestas desde una perspectiva psicoanalítica por el profesor mexicano Mauricio Pilatowski. Finalmente (en realidad segundo expositor), el reconocido sacerdote jesuita, politólogo e historiador, el padre Fernán González González puso de manifiesto la necesidad de adoptar un enfoque diferencial en los análisis de la violencia que atienda a la complejidad del fenómeno, en lugar de ceder a la fácil mirada fatalista que postula un pasado esencialmente violento y acata la renuncia a un futuro positivamente diferente. La noción de conflicto que lo entiende como elemento constitutivo de la vida social y de la vida personal, propugnada por Estanislao Zuleta hacia los años 80 en su afamado “Elogio de la dificultad”, gravitó sobre el discurso de todos los participantes. Por último, las disquisiciones en torno a los asuntos de la memoria, el escepticismo frente a su efectividad en el loable propósito de la “no repetición”, la demanda de una “memoria crítica” que denuncie el uso unívoco y maleable que se le ha dado al concepto y la calidad de “hecho social” asignado a la memoria, configurador de un relato narrado desde posturas problemáticas (visión de los vencidos, de los vencedores, etc.), cerraron la primera jornada del evento en la noche del 9 de mayo.
El filósofo y profesor de la Universidad de los Andes, Sergio de Zubiría Samper, en una de las sesiones del Simposio Internacional Conflicto, Memoria y Justicia. Universidad del Valle.
Foto: http://www.univalle.edu.co
La segunda y última jornada del Simposio giró alrededor de los aportes cinematográficos habidos en la representación y comprensión del conflicto armado colombiano. Tres fueron los panelistas, de los cuales, tal vez, el más destacable, sin detrimento de los otros, fue el sargento de marina actualmente en servicio, Jorge Andrés Giraldo Antía. Heredero por línea materna de la denominada “berraquera” en la lucha por la vida y de una inclinación congénita hacia la fotografía y el registro fílmico, documentó desde muy temprano su recorrido por el mundo: de joven popular cuyo escalamiento social está unido a la experiencia directa de la guerra como militar de la Armada, pasando por el accidente de un grave atentado hecho por la guerrilla FARC-EP que, sin imaginarlo en su momento, daría nombre al proyecto audiovisual “Nueve disparos” que presentó durante su intervención. El más destacable, quizá, por ser el invitado que no sólo ha visto el conflicto desde los claustros de la academia (“Nueve disparos” es su tesis de pregrado en Comunicación Social de la Universidad Javeriana), sino que también ha vivido sus horrores como actor armado. Jorge Andrés Giraldo Antía ofrece una desgarradora pieza autobiográfica que se acerca un poco a la sentida urgencia, expresada por el ensayista Ricardo Forster, de visibilizar la dimensión humana de aquellos directamente implicados en la guerra, recuperarlos con sus “nombres, su vida cotidiana y utopías”. Los otros dos panelistas, el magistrado Martín Agudelo Martínez y el cineasta Juan Manuel Acuña, expusieron, el primero, un trabajo documental que indaga la representación de la violencia en el acervo cinematográfico del país y, sobre todo, el papel de la justicia plasmado en los filmes; el segundo, un proyecto de largometraje animado, incompleto hasta la fecha, titulado “El padre, el hijo y el Espíritu Santo” que, enfocando tres personajes del ámbito religioso nacional (Moseñor Miguel Ángel Builes, el cura Camilo Torres y el padre Rafael García Herreros), transita por los tres estadios del conflicto que encarna cada uno, es decir, por la violencia bipartidista, la violencia guerrillera y la violencia del narcotráfico.
Clausurado el Simposio con un balance del padre Fernán González, la esperanza de un país en paz parece estar sancionada por la probablemente muy bien ponderada actitud optimista del académico religioso, para quien no existe una última oportunidad de cambiar los derroteros de la historia, oportunidad encomendada, naturalmente, a las generaciones jóvenes.